Le había perdido el rastro a Melody, sabiendo que allá por el 2017 tuvo un serio accidente del cual felizmente se recuperó.
Me ha encantado que este nuevo álbum marque distancias de su predecesor. La monotonía de Kevin Parker TM que consistía en la misma instrumentación utilizada en todas partes, como si todas las canciones se hubieran grabado durante la misma sesión, ha sido reemplazada por una psicodelia pop progresiva que va dando una estructura de cambio maniatico a cada track. La voz se mantiene cálida, etérea y melódica, como en "Breathe In, Breathe Out"o el cortito bossa de "Var Har Du Vart" que suena a mitad del disco, hasta se vale del autotune como en "Desert Horse". Me hubiese gustado ver un featuring con algún rapero en los beats más instrumentales de "Cross My Heart" o "Shirim", se que suena algo loco pero este álbum da para muchas cosas.
Melody me gustas más así, dejando claro que nunca fuiste la versión francesa y femenina de Tame Impala, 5/5 pa' ti.
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